Hace una semana tuvimos la oportunidad de preguntarle a Marco Enríquez-Ominami sus opiniones sobre cómo debiera diseñarse una propuesta de postnatal. Ayer, Lunes 2 de Agosto, el Presidente Sebastián Piñera recibió las propuestas de la comisión presidencial "Mujer, Trabajo y Maternidad" sobre el tema, lo que vuelve nuestra conversación con ME-O particularmente contingente. A decir verdad, nos ha impresionado el inmenso número de mujeres escribiéndonos a El Repuertero con sus dudas respecto al proyecto: aquí, una primera respuesta para un tema que nos comprometemos a seguir en detalle a medida que la legislación avance. Considerando las aspiraciones presidenciales de ME-O, bien vale una mirada a su propuesta.
ME-O aspira a un postnatal en el que el tiempo cedido al recién nacido complete seis meses, pero éstos no estén absolutamente centrados en la mujer: “yo no creo en el postnatal de 6 meses para las mujeres, creo en el 4 más 2”, señaló.
¿Qué es eso? Nos explicó que los primeros cuatro meses, en su opinión (y no representando una postura de partido), debieran ser obligatorios e irrenunciables para la mujer, y luego habrían dos meses asignados al hombre en que la flexibilidad prima un poco más: el hombre podría tomar esos dos meses en paralelo con su mujer, o podría esperar a que el plazo de ella termine: “que sea opcional, y la pareja se ponga de acuerdo”, propone. Sí considera que es bueno involucrar al hombre en la crianza de los hijos, y ésa opinión nace de la experiencia que él tuvo como padre: “me parece tremendamente bien que los hombres se empiecen a (involucrar en la crianza), yo lo viví como padre, por lo demás: el postnatal, el que sea una obligación del papá “bancarse” dos meses, le haría muy bien”. O sea, estos dos meses asignados al hombre pueden ser simultáneos a los de la madre, o sucesivos a ellos, “pero llegamos a seis”, explicó ME-O.
Como bien han apuntado otros artículos, discutir sobre el postnatal no se trata sólo de coordinar algunos permisos, si no que es debatir respecto a los roles de género en nuestra sociedad. Para ME-O es fundamental que al hablar de paridad se consideren no sólo las necesidades de la mujer, si no que también las de ellos: “también hay que preocuparse del rol del hombre, de la paridad. Los temas de género siempre se ven de un solo lado, el rol de la mujer, pero aquí se aclara que el hombre debiera involucrarse en la paternidad. Entonces: dos meses a cargo del hombre”, remató el ex-candidato presidencial.
Además está la arista económica: “nosotros no llegamos a estas conclusiones por este argumento (económico), pero sí es uno que nos ayuda a defender la idea: que es carísimo al estado y a todo el mundo el sistema ´a la chilena´”, explicó, “muchas mujeres se las arreglan para tener 6 meses: licencias que da el médico, estiran las cosas. Me parece mucho mejor regularlo”.