Marcha-CUT-596x330.jpg [11]

Luego de marchar por la Alameda, en el contexto de la conmemoración del Día Internacional del Trabajador, el acto organizado por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) dejó en claro la estrecha relación que existe entre los dirigentes de la multisindical y las autoridades de Gobierno.

En su discurso, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, aludió a las reformas laborales como el cuarto pilar de la actual administración, rechazó la creación de una AFP estatal, apuntó a la necesidad de un nuevo Código del Trabajo, llamó a fortalecer la sindicalización ante la negociación interempresas y apoyó explícitamente el proyecto de Reforma Tributaria, dando claras señales en favor del Gobierno de Michelle Bachelet.

“La salida de la derecha del gobierno y la llegada de la Nueva Mayoría al Parlamento y al Gobierno son una buena señal para nosotros, pues se superan cuatro años de calvario para el movimiento sindical”, declaró la líder sindical.

Asimismo, aseguró que “también sabemos que no es suficiente, si no realzamos el rol de los actores sociales y el movimiento sindical organizado. Enfrentados a un Chile que clama por más justicia social, no somos ni seremos actores pasivos en la defensa de un proyecto de país distinto al que hemos vivido por cuarenta años”.

En representación del Ejecutivo, la ministra del Trabajo, Javiera Blanco, destacó el compromiso de avanzar en una agenda laboral sobre derechos colectivos postergados por tanto tiempo, confirmando que se trata del cuarto pilar del programa de Gobierno, aludiendo a las recientes indicaciones firmadas respecto del multirut y de las trabajadoras de casa particular.

Acompañada del vocero de Gobierno, Álvaro Elizalde, y de la ministra del Sernam, Claudia Pascual, insistió en la importancia de la Reforma Tributaria y en los motivos de su participación en el acto conmemorativo.
“Este es un acto de la CUT, un acto en el que se ha hecho un llamado amplio a todos quienes quieran sumarse a esta conmemoración del día del trabajador. Nosotros, en nuestra calidad de trabajadores, ciudadanos y también de representantes del Gobierno, adherimos a un anhelo de país más justo. Hablamos de una democracia política y económica, lo que implica también avanzar en emparejar la cancha”, explicó.

La propia ministra agregó que “tomo muy bien el apoyo a la Reforma Tributaria, tanto de Bárbara (Figueroa) como de todos aquellos que quieran sumarse a entender que hoy es algo necesario”.

Quien también se refirió al discurso de la líder de la CUT fue el presidente del partido Comunista, Guillermo Teillier. “Hay que dar espacio y tiempo a que las cosas avancen. Este Gobierno está cumpliendo con el programa y los objetivos planteados, hay que esperar los plazos para alcanzar las reformas”, advirtió, reconociendo que “no todo se podrá concretar en este periodo presidencial”.

Además, destacó la presencia de la ministra Claudia Pascual y del subsecretario de Previsión Social, Marcos Barraza, ambos militantes comunistas.

Desde la Alianza, en tanto, calificaron el discurso de “complaciente con el Gobierno” y de ser “absolutamente ideologizado”.

Así lo expresó el diputado de RN Alejandro Santana, quien junto con recordar que Bárbara Figueroa aprobó completamente la propuesta de reforma tributaria del Ejecutivo, durante su participación en la comisión de Hacienda de la Cámara, criticó a la organización multisindical y a su presidenta.

“No es solo por su discurso, sino que por la actitud que ella ha tenido, lo que le hace mal a la CUT, que debe ser un organismo absolutamente independiente y autónomo a los gobiernos, indistinto de la ideología política que esté detrás de los dirigentes”, aclaró.

En esa misma línea, apuntó a que la dirigente “tiene un nivel de complacencia importante, lo que obviamente neutraliza a la presidenta nacional en lo que es la lucha de la CUT con el Ejecutivo, que siempre será insuficiente lo que pueda proponer un gobierno en función de las necesidades y propuestas de los trabajadores. Ella toma una posición absolutamente ideologizada”.

A esto se suman diversas organizaciones sindicales, políticas y sociales que critican a la CUT por haber dejado de representar los intereses de los trabajadores, quienes también se manifestaron en el Día Internacional del Trabajador a través de una marcha paralela.