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La oficina de patentes y marcas de Estados Unidos (USPTO) ha otorgado oficialmente la patente número 8.401.009 [17] a Jack Dorsey y Biz Stone — ¿Y qué pasó con Ev Williams? — respecto de la red social del pajarito azul y su mecánica, con lo que se han hecho de la propiedad intelectual de la red social y de su método de funcionamiento, el que ha sido usurpado por distintos clones que buscan replicar su éxito en distintos lugares.

Pero quizás el hecho más importante es que esta adjudicación le entrega una herramienta muy poderosa contra Facebook y el posible uso — ahora ilegítimo — de características propias de Twitter integradas al producto de la empresa de Mark Zuckerberg para aumentar sus funciones.

La solicitud de la patente fue procesada en 2007, y a sabiendas que Twitter iba a conseguirla, se han encargado de pregonar abiertamente que sólo usarían este tipo de recursos en el campo legal como método de defensa en caso de amenaza a su creación.

Esto cae como anillo al dedo para la compañía de San Francisco, pues esta adjudicación tendrá un impacto positivo en su valoración de cara a una futura apertura a la bolsa, algo que — se especula — debería suceder más adelante en el año.