Hasta el barrio Ovejería llegó un grupo de manifestantes que continúan organizando acciones para que Juan Barros renuncie a su cargo como obispo. El Movimiento de Laicos lo acusa de encubrimiento por las víctimas de Karadima.

Sin embargo, el obispo de Osorno, quien lamentó la situación, dijo al respecto que “soy un enviado del Papa”, y se mostró confiado en que con paso del tiempo "se vayan limando las asperezas".

La "funa" que realizaron al sacerdote fue durante una ceremonia de confirmación de 30 jóvenes, que se llevó a cabo la mañana de este domingo en la parroquia El Buen Pastor. Los manifestantes estuvieron gritando, con pancartas y cánticos fuera de la iglesia y, cuando salió Barros, se abalanzaron contra el auto cuando este iba saliendo del recinto.

Loa familiares y personas que asistieron a la misa afirmaron estar muy molestos debido a la interrupción constante durante la ceremmonia. No obstante, la veintena de manifestantes señalaron que "Barros no es un ejemplo para encabezar ese tipo de sacramentos".

Recordemos que la semana pasada el Movimiento de Laicos realizó una misa, encabezada por Peter Kliegel, que tuvo como objeto "aclarar el camino", tras el nombramiento de quien fuera muy cercano a Fernando Karadima.

Kliegel, en entrevista con radio Cooperativa, sostuvo que no logran entender la decisión del Santo Padre, porque el obispo "al cual debemos obediencia, ha dividido a nuestra comunidad y necesitamos claridad".