La sequía que afecta a nuestra provincia es un tema preocupante. Nuestros campos están cada día más secos por el inclemente sol. Y según los expertos, el "buen clima" seguirá por un harto tiempo más. Lo grave es el panorama que se nos viene por delante. Recientemente fueron declaradas en emergencia agrícola 4 comunas: San Juan de la Costa, Purranque, Río Negro y San Pablo.
Todas ellas se encuentran con altos niveles de sequía, y lo que es peor, sin agua para el consumo humano. Por ejemplo, en la comuna de San Pablo varios son los sectores rurales que no cuentan con el vital elemento, entre ellos Bellavista, La Junta, Lololhue, Quilmahue Alto, Caracol, etc.
Mediante un camión aljibe que recorre el sector una vez por semana, se obtiene un poco de agua para el consumo de las familias. De las tierras, ni hablar. Ni una sola gota. Las pocas praderas que quedan se están secando y los agricultores se han visto obligados a usar el silo que tenían guardado para el invierno en sus animales.
El concejal por San Pablo Manuel Carrasco, también comentó lo grave de la situación, argumentando que “las autoridades superiores reaccionan muy tarde frente al problema que es ahora, no en dos meses más. Por ello el municipio de San Pablo se ha visto en la obligación de entregar fardos a las comunidades rurales para paliar en parte la gravedad de la situación. Y ello significa gastos extras para el municipio. Por lo mismo, el llamado es a la autoridades regionales y centrales a reaccionar antes, no cuando ya la situación se torna de grave a crítica”.
Como ven, el estado actual no es nada alentador para las comunidades rurales. Aquí les muestro el ejemplo de la comuna donde pertenezco. Es de esperar que el clima pueda cambiar y regalar el vital elemento a los agricultores. Este, entonces, es también un llamado a la ciudadanía a cuidar el agua en la ciudad.